Después de 11 años, el cerebro del secuestro de Tantoyuca cae

* Tras el crimen, logró huir y permanecer prófugo durante más de 11 años*

Xalapa | 2025-01-11

Tras más de una década evadiendo a la justicia, un hombre señalado como el autor intelectual de un secuestro agravado en 2013 en agravio de una comerciante  fue detenido en el municipio de Ecatepec, Estado de México.

Agentes de la Policía Ministerial de Tantoyuca, en coordinación con la Fiscalía mexiquense, lograron la aprehensión de Javier V.R., quien era buscado bajo la causa penal 88/2014 por el secuestro y homicidio de Alejandrina X., una comerciante de oro de la colonia El Rastro, en Tantoyuca.

El 16 de julio de 2013, Alejandrina X. fue interceptada mientras salía de su casa en su vehículo. Según las investigaciones, su vecino, Javier V.R., acompañado de dos cómplices armados, la privó de su libertad. Durante el secuestro, la víctima llevaba un lote de alhajas de oro, artículos que los secuestradores robaron junto con sus tarjetas bancarias, utilizadas posteriormente para realizar compras y retiros.

Tres días después, las autoridades detuvieron a dos de los involucrados, quienes confesaron haber asesinado a la comerciante y señalaron a Javier V.R. como el cerebro detrás del crimen. Sin embargo, este último logró huir y permanecer prófugo durante más de 11 años.

La captura en Ecatepec

La detención ocurrió en la calle Amapolas, en el centro de Ecatepec, mientras el acusado se dirigía a realizar ejercicio. Tras ser identificado, los agentes ministeriales procedieron a su arresto sin mayores incidentes.

Javier V.R. fue trasladado de inmediato a Tantoyuca, donde quedó a disposición del juez que lo requería. Su captura pone fin a años de búsqueda y reabre una herida que marcó a los habitantes de la colonia El Rastro, quienes recuerdan con dolor el trágico desenlace de Alejandrina X.

Justicia tardía, pero necesaria

Con este arresto, las autoridades esperan cerrar un caso que ha sido símbolo de impunidad en la región. Aunque pasaron más de 11 años, los familiares de la víctima confían en que el detenido enfrente las consecuencias legales de sus actos.

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