México | 2024-12-10
Para poder utilizar casi cualquier servicio digital hoy en día, lo más probable es que tengas que pagar una suscripción mensual o anual. Ya quedan lejos los días en los que podíamos simplemente comprar un software y usarlo durante todo el tiempo que queramos. Ahora las compañías digitales nos piden un esfuerzo económico mayor y más constante a cambio de acceder a sus servicios, lo que pone las cosas más difíciles para los usuarios.
Un 40% de usuarios están cansados de las suscripciones
Según indica una reciente encuesta de ExpressVPN, el 40% de usuarios de internet considera que debe pagar una cantidad excesiva de suscripciones para poder financiar sus actividades digitales. La mayoría de la gente hace frente al pago de al menos una herramienta de seguridad digital –un antivirus, un gestor de contraseñas–, un servicio de streaming como Netflix o Prime Video, un servicio para escuchar música, y muchas otras herramientas más.
Este problema está asociado con un fenómeno conocido como la ´fatiga de las suscripciones´, lo que a su vez supone un problema para muchas empresas que deben encontrar la manera de convencer a los usuarios para que hagan frente al pago de sus servicios. El problema es que el modelo de suscripción parece estar alcanzando sus límites, con lo que cualquier nuevo servicio lo tiene muy difícil para convencer a los usuarios.
Ante la dificultad para hacer pagos llegan las cancelaciones
El estudio de ExpressVPN apunta que un 71% de los usuarios paga al menos entre 1 y 4 suscripciones online, y esta cifra continúa aumentando. Además, los precios de las suscripciones más populares han subido durante los últimos años. El reciente aumento de precios de Netflix en México llevó la cuota del plan estándar general de 219 pesos a 249 pesos, y lo mismo está ocurriendo con muchos otros servicios.
A esto hay que añadir las continuas barreras impuestas por algunas compañías a la hora de compartir una cuenta con familiares o amigos. La propia Netflix ahora impide compartir la cuenta con personas que no residen en el mismo domicilio, lo que encarece todavía más el acceso a sus servicios. Es por esto que muchos usuarios están optando por la cancelación de sus cuentas en favor de servicios más económicos o enteramente gratuitos.
El peligro de las plataformas piratas
En el caso de las suscripciones de streaming, en México sigue muy extendido el hábito de optar por plataformas gratuitas para ver películas o partidos de fútbol. Algunas de las plataformas de este tipo más populares en toda América Latina operan de hecho desde México, lo que hace que sean todavía más populares en nuestro país. Sin embargo, estas plataformas entrañan serios riesgos para los usuarios.
El más importante son las infecciones con malware, que pueden ocasionar el robo de datos financieros de los usuarios afectados mediante troyanos o keyloggers. Este peligro es cada vez mayor considerando la cantidad de pagos online que hacemos cada mes. Una infección en una computadora o un celular donde hagamos pagos con la tarjeta de crédito puede suponer un serio problema económico.
Equilibrio entre el número de suscripciones y unos precios razonables
Ante la saturación del mercado del software como servicio, se hace necesario adoptar ciertos ajustes tanto por parte de los usuarios como por parte de las empresas. Se espera que las compañías digitales moderen su escalada de precios y ofrezcan planes con tarifas más diversas, de modo que se pueda optar por planes de pago más económicos con servicios reducidos, pero accesibles por parte de quienes no pueden permitirse una tarifa completa.
Por su parte, los usuarios deben acostumbrarse a resistir un poco mejor las campañas de marketing de estas compañías. Sencillamente no podemos suscribirnos a todo lo que nos apetece, así que se hace necesario elegir de forma prudente qué servicios queremos contratar en cada caso.
Además, muchos de los servicios digitales que se pagan mediante suscripción pueden compartirse con amigos o familiares para reducir todavía más el importe a pagar. Combinando todos estos recursos es posible ahorrar mucho en las suscripciones online, de manera que no tendremos que hacer frente a tantos gastos mensuales. La fatiga de las suscripciones puede combatirse con un poco de planificación y moderación en nuestros hábitos de consumo.