México | 2024-11-01
Más de 150 personas sin vida, varias más desaparecidas y millones de euros en daños es el saldo de las inundaciones que afectaron al este de España, en especial a la región de Valencia.
Las imágenes de autos flotando entre las calles, edificios y casas inundadas, así como de personas buscando refugio se han hecho virales a lo largo de la semana, causando varias reacciones a lo largo del mundo.
Según especialistas, en cuestión de horas cayó una cantidad de lluvia similar a la que cae a lo largo de un año, causando crecidas de ríos que en pocos minutos arrasaron todo lo que había a su paso.
Pero, ¿qué pudo haber provocado esta devastación? Un fenómeno meteorológico llamado Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) habría sido el causante del peor desastre del que se tenga registro en esta zona de España en el último siglo.
El término DANA comenzó a ser usado por meteorólogos ibéricos para diferenciarlo del término ´gota fría´ que es un poco más genérico para referirse a cualquier situación de lluvia intensa en las costas mediterráneas de la Península Ibérica.
La DANA ocurre cuando una masa de aire polar muy frío queda ´atrapada´ y empieza a circular en altitudes muy elevadas, de entre cinco y nueve mil metros. Es al chocar con aire cálido y húmedo del océano, en este caso el Mediterráneo, que se generan fuertes tormentas.
A diferencia de un temporal que suele desplazarse casi siempre al este, una DANA puede ´estacionarse´ en un mismo sitio por varios días o moverse al oeste; sin embargo, no siempre tienen los efectos tan destructivos como los vistos en esta semana.
Y es que en España han ocurrido estos fenómenos de forma regular, aunque pocas son las que quedan grabadas en la historia por sus efectos en zonas habitadas.
Según expertos, el aumento en intensidad de esta DANA y otras que se han presentado en los últimos años estaría relacionado directamente con el cambio climático, en especial por el aumento en la temperatura del Mediterráneo que potencializa los efectos de la DANA.
Imágenes de satélite han mostrado el resultado de este temporal en la Península Ibérica, donde se puede ver cómo poblados enteros habrían quedado prácticamente bajo el agua mientras los ríos recuperan muy lentamente su nivel.