Ciudad de México | 2025-01-15
Marco Rubio, nominado por Donald Trump para liderar la diplomacia de Estados Unidos, destacó la importancia de trabajar en conjunto con México para combatir a los cárteles de la droga, a quienes señaló por controlar extensas áreas fronterizas.
Aunque consideró "imperfecta" la idea de designarlos como organizaciones terroristas extranjeras, no descartó usar esta o nuevas herramientas para enfrentar la amenaza.
Sobre el uso de la fuerza militar, señaló que sería una decisión del presidente Trump, no del Departamento de Estado.
Rubio destacó que el narcotráfico impacta tanto a México como a Estados Unidos, afectando la soberanía y procesos políticos del país vecino.
Abogó por una política exterior firme, enfocada en los intereses estadounidenses, mientras criticó duramente a China y reiteró su respaldo a Israel.
Rubio, de 53 años e hijo de inmigrantes cubanos, sería el primer secretario de Estado hispano en la historia de Estados Unidos.
Su fluidez en español y experiencia de 14 años en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado le han asegurado un respaldo sólido en el proceso de confirmación.
Incluso los demócratas han apoyado su nominación, contrastando con otros candidatos de Trump que enfrentaron resistencia en ambos partidos.
En la audiencia, Rubio planteó la necesidad de un enfoque más agresivo contra China, criticando su historial en derechos humanos y alertando sobre la influencia que el país asiático podría ejercer en áreas clave como la seguridad y la salud globales.
También defendió a Israel contra la Corte Penal Internacional y justificó su postura dura contra Cuba y Venezuela, alineada con las políticas del primer mandato de Trump.