México | 2024-04-04
Hay que decirlo; cada que ocurre un fenómeno astronómico la humanidad suele darle alguna connotación divina y mística. Y los eclipses tanto solares como lunares son los máximos exponentes de esta situación.
Con el eclipse solar total que se vivirá el día 8 de abril en México y gran parte del hemisferio norte, los mitos que envuelven a esta danza cósmica resuenan en los oídos de miles de personas alrededor del mundo; ¿sabes cuáles son?
Si bien los cambios ambientales que provoca el paso de la luna frente al sol sí causan afectaciones en nuestros cuerpos, hay algunos mitos que se han originado debido a las tradiciones y significados que los pueblos originarios han dado a este fenómeno.
Mucho se ha dicho sobre si los eclipses solares producen rayos que causan daños irreversibles a quienes lo miran directamente. Lo cierto es que mirar directamente al sol, haya o no un eclipse, puede provocar afectaciones en la retina.
Y si bien es cierto que durante un eclipse la corona solar puede emitir radiación electromagnética, esta es más débil que la luz emitida por el sol, por lo que no podría causar ceguera.
Aún así, es importante proteger los ojos durante todas las fases del eclipse, incluido cuando la luna ha cubierto parcialmente al sol.
Se ha dicho que durante los eclipses solares, la radiación producida durante el fenómeno puede afectar a las mujeres embarazadas, causando diversas malformaciones u otras situaciones que ponen en peligro al bebé.
Sin embargo, hasta ahora no hay un solo estudio que avale que alguna partícula que desprenda el sol pueda dañar a un feto; incluso, día a día, billones de partículas llegan desde el espacio y atraviesan nuestros cuerpos sin que afecten a los seres humanos.
Seamos directos: un eclipse solar no tiene la capacidad de generar un terremoto. Esta idea puede tener más un origen religioso, al relacionarse a este evento como la antesala de una catástrofe al entrar en penumbras las regiones en donde podía apreciarse.
Y si bien es poco probable que ocurra algún desastre después de que este fenómeno ocurra, hay que recalcar que de llegar a suceder este no tendría ninguna relación con el paso de la luna frente al sol, siendo una coincidencia en el mejor de los casos.
Lo que sí es posible es que, debido a las ideas sobre cuestiones esotéricas y místicas que rodean al eclipse solar, algunas personas pueden llegar a experimentar un grado de ansiedad elevado.
Miedo, aprehensión y malestares psicológicos también se pueden hacer presentes en quienes creen en el lado paranormal de los eclipses solares; ¿qué piensas al respecto?