Orizaba | 2024-09-08
Debido a que en época de lluvias es común que las serpientes lleguen a buscar refugio en las casas, es importante que sepan que son pocas las especies venenosas que hay en la región y que están cerca de las zonas urbanas, indicó María Concepción Zárate, integrante del grupo Zarigüeyas de las Altas Montañas.
Explicó que cuando hay precipitaciones pluviales intensas las madrigueras de los ofidios se inundan, por lo que al ser estos animales de sangre fría buscan refugios secos o el calor para regular su temperatura.
Algunas veces, mencionó, se meten abajo de aparatos electrodomésticos, como las lavadoras, o de las camas incluso, porque al ser sitios oscuros se sienten a salvo en esos lugares.
Señaló que en caso de ver una serpiente es importante mantenerse alejados de ella, colocarse a unos tres metros para evitar que se sienta agredida, fijarse en cómo es o tomarle foto o video y alejar a niños y mascotas de ella.
María Concepción Zárate indicó que en la zona prácticamente no hay serpientes de importancia médica y las que hay no llegan siquiera a los tres metros.
Comentó que las más grandes, que pueden ser de hasta cuatro metros, son las boas, conocidas como mazacuatas, o la ratonera negra, pero son inofensivas para el hombre.
La integrante de Zarigüeyas de las Altas Montañas comentó que en la zona abundan los falsos coralillos; la serpiente conocida como Ojo de Agua, que es venenosa, pero su veneno no llega a matar al ser humano, y las caracoleras, que se alimentan de lombrices y caracoles y no son venenosas.
Mencionó que si ya identificaron que no es una serpiente venenosa se puede recoger con una escoba y un recogedor manteniendo distancia, meterla en una cubeta y llevarla a otro lugar a liberar.
Comentó que aunque no sean venenosas, algunas pueden morder y su mordida es dolorosa como cualquier otra mordida, pero si no sabe qué ofidio fue, aplicar el antídoto puede ser contraproducente.
Si no las saben manipular, apuntó, lo mejor es pedir el apoyo de bomberos o de Protección Civil e incluso de grupos como el de Zarigueyas, que tienen experiencia en manejo de estos animales, a fin de no lastimarlos y evitar que mueran.
En caso de mordadura y si ya se confirmó que es una serpiente venenosa, destacó, se debe aflojar la ropa a la persona, quitarle anillos, relojes, zapatos, cinturones y otras prendas ajustadas, y trasladarla de inmediato al hospital.
"Lo que no se debe hacer es hacer torniquetes, chupar el veneno o amarrar animales a las heridas, porque por falsas creencias las personas amarran a otros animales a las heridas. Tampoco hay que tomar esencias o jugos o preparados que no sean recetados por médicos, pues pueden afectar", detalló.
María Concepción Reyes abundó que una persona con una mordedura de serpiente venenosa no va a morir a los cinco minutos, ya que es un proceso en donde la herida empieza a necrosar, hay taquicardia, por eso lo importante es trasladarla al hospital más cercano para que apliquen en antídoto correspondiente.