Ciudad de México | 2024-08-14
Estás en el mercado, listo para comprar limones para tus bebidas o tacos. De repente, el precio se dispara y te das cuenta de que lo que antes era un ingrediente común, ahora te cuesta una fortuna.
¿La razón? La crisis de extorsión que está sacudiendo a los productores de limón en Michoacán.
Michoacán encabeza la producción de limón en México, seguido por Veracruz y Colima.
Grupos criminales, como Los Viagras, están exigiendo hasta 40 mil pesos por cada camión de limón que sale de estas áreas.
Este dinero no es para cubrir costos de producción ni mejoras en infraestructura, sino para permitirles trabajar sin ser acosados.
Los limoneros, frustrados y cansados de este abuso, decidieron parar indefinidamente la producción.
Las huertas están vacías y los camiones de limón están parados, afectando no solo a los productores, sino a toda la cadena de suministro.
Desde enero hasta junio de 2024, Michoacán ha registrado un aumento significativo en las denuncias por extorsión, con un total de 158 casos, un salto de 30 casos respecto al año pasado.
Esta extorsión no solo afecta a los productores, sino que también se refleja en el precio del limón en el mercado.
La crisis de extorsión en Michoacán no es solo una historia de criminalidad y violencia; es una realidad que amenaza con afectar el precio de uno de los ingredientes más básicos en la cocina mexicana.
Mientras los limoneros luchan por su supervivencia, el país se enfrenta a la posibilidad de que lo que antes era una compra cotidiana se convierta en un gasto inesperado.