México | 2023-02-14
Antes de acuñar en México las primeras monedas coloniales, se usaban monedas de plata y la única manera de definir su valor era pesándolas, por lo que un pedazo de plata bien pesado se comenzó a llamar peso, de aquí nace el nombre de la moneda mexicana.
Antes de la llegada de los conquistadores a América el uso de cacao, jade, plumas y otros muchos productos eran utilizados como medio de cambio entre las culturas prehispánicas.
Con los españoles, llegaron también las monedas hechas con los metales saqueados de Tenochtitlán, como el oro.
En la Nueva España las monedas eran escasas, así que utilizaron otros medios de pago, donde destacó el oro al peso, fue así que elaboraron piezas de oro en distintas denominaciones pero este método fracasó ya que se multiplicaron las estafas.
Después, para aumentar el circulante, alearon poco oro con cobre y crearon la moneda "Oro de Tepuzque", pero fue rechazada, sobre todo por poblaciones indígenas.
Ante esta problemática se recurrió al trueque y a los pagos en especie.
Fue hasta 1535 cuando el virrey Antonio de Mendoza fundó la Real Casa de Moneda, un acontecimiento que coincidió con descubrimientos de yacimientos de plata. Después de un año inició labores, según el Museo del Banco de México.
Fue así que se labraron monedas de plata y se prohibieron las de oro.
Debido a la abundancia de la plata esta vez no tuvieron problemas para la aplicación del sistema, que comenzó a operar de la misma manera que en España: misma ley, peso y valor nominal para la moneda.
En ese sistema, la mayor denominación era la del peso fuerte o peso duro, equivalente a 20 reales. El término prevalecería a pesar de que durante los levantamientos los caudillos acuñaron sus propias monedas.
El peso español habría recibido su nombre precisamente de la tasación de productos al peso de los metales, mientras que el peso lo hizo de la moneda española, usada en la colonia gracias a las minas de plata.
Ocho países denominan peso a su divisa en la actualidad, además de México tenemos a Argentina, Chile, Colombia, Cuba, Filipinas, Dominicana y Uruguay. Todos formaron parte del imperio español.