Localizan en Coatzacoalcos a abuelito perdido en Veracruz; extrañaba Coatza
Tiempo de Lectura: 2 min Carlos Pintos desapareció ayer en Veracruz; fue localizado en Coatzacoalcos
La noche del lunes, familiares del señor Carlos Pintos del Valle confirmaron su localización. En este sentido, "Calín" fue ubicado en Coatzacoalcos, gracias al llamado de las personas que lograron identificarlo a raíz de la difusión de su extravío en redes sociales.
Asimismo, es preciso mencionar que Carlos Pintos cuenta con una digna trayectoria en el ámbito deportivo, reconocida y celebrada en Coatzacoalcos por sus múltiples contribuciones, tales como su desempeño como entrenador de volibol femenil por más de 30 años, así como formador de las selecciones infantiles, juveniles y como fundador de la Liga Municipal de Volibol.
Su nieta, María José Cevallos, relató para el corporativo Imagen del Golfo dicha experiencia, cuyo alivio fue haber recibido el llamado notificando su localización a más de 3 horas de distancia.
Aunque le resulte increíble, tampoco lo considera descabellado, ya que Coatzacoalcos siempre ha sido considerada por "Calín" como su hogar.
Mis abuelos y mi mamá siempre vivieron en Coatza, aunque ya tienen rato viviendo con nosotros aquí en Veracruz. Pero a veces, mi abuelo extraña mucho ese lugar. No sabemos todavía cómo sucedió todo, quizá alguien le ayudó, pero lo encontraron en la terminal de autobuses de Coatza y enseguida llamaron al teléfono de mi mamá para avisarnos.
"En la mañana (del lunes), mi abuelo nos había dicho que quería ir a Coatzacoalcos, pero nunca creímos que se iría realmente. Le preguntamos cómo le había hecho, pero ni siquiera él sabe. Afortunadamente ya se encuentra en casa y sólo nos queda agradecer todo el apoyo de la gente que se unió a nuestra búsqueda", contó "Majo" Cevallos.
Finalmente, la familia de Carlos Pintos del Valle comentó que se encuentra en plenas condiciones, aunque un poco cansado y desorientado. Aunque tomará tiempo, es posible que vean nuevamente a "Calín" caminar en las calles de la Graciano Sánchez y La Tampiquera, portando una de las señas particulares que, de acuerdo con su nieta, le enaltecen: su sonrisa.
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