Un retroceso cancelar la reforma energética: IP de Orizaba

La posibilidad de que la reforma energética sea cancelada es una medida que acabará con la confianza de inversionistas, pues no se puede cambiar las reglas de inversión un día y al otro también, por lo que los industriales en el país expresan su oposición a esa medida, señaló Octavio Gracián Malpica, representante de la Canacintra en la zona.

Consideró que la anulación de la reforma representaría un retroceso histórico al evitar, de primera instancia, la realización de nuevas licitaciones para actividades de exploración y producción de hidrocarburos.

Señaló que los industriales opinan que inhibir las inversiones privadas en las áreas de venta de electricidad, gasolina, diésel y gas LP solo permite mantener monopolios públicos o privados, lo que generalmente toma recursos de los usuarios o del erario y genera falsas ideas de éxito o crecimiento.

Mencionó que están de acuerdo en que se debe definir una política energética que permita proyectar a México al futuro que se quiere, pero para ello es necesario que se tome en cuenta la opinión de los principales actores en el país.

Destacó que en torno a este tema Canacintra ya emitió un posicionamiento, en donde hace ver que los energéticos representan insumos indispensables para la competitividad y el crecimiento económico, la generación de empleos y el combate a la desigualdad, por lo que su calidad, suministro y precio son elementos clave para la actividad económica, en especial para el sector industrial, ya que sus costos de producción reciben un impacto directo por la energía, el cual va de 30 al 60 por ciento.

Señaló que si bien en su momento Pemex y CFE cumplieron con un importante rol, surgieron en el marco de una economía cerrada que hoy ya no aplica, por lo que deben fortalecerse para poder competir en un mercado abierto que tiene estándares cada vez más exigentes.

Gracián Malpica señaló que actualmente es necesario fortalecer la confianza de los inversionistas para lograr el crecimiento económico con justicia como única vía para la mejora sostenida, y los modelos de política energética basados en monopolios estatales con enfoque recaudatorio “ya son ineficaces”.

En su momento, recordó, la Canacintra apoyó y acompañó la reforma energética, ejercicio que derivó en la apertura de tres mercados al abrirse a la inversión privada, nacional y extranjera, lo que permitió el año pasado detener la caída histórica en la producción de petróleo de México con la inversión que dieron los contratos adjudicados en rondas de licitación abiertas.

“México necesita anualmente inversiones privadas y públicas del orden de los 280 mil millones de dólares para generar un crecimiento económico por arriba del cuatro por ciento; dichas inversiones requieren certeza jurídica y un marco legal estable en el mediano plazo que genere confianza en quienes arriesgan su dinero, crean empleos y soportan el presupuesto federal mediante el pago de impuestos.

“Las empresas privadas del sector energético tienen 107 contratos firmados que implican inversiones 36 mil millones de dólares adicionales en los próximos años, y si bien se ha reiterado el respeto a estos contratos, las reservas ‘3P’ (posibles, probables y probadas) de petróleo deben sostenerse o acrecentarse con nuevas inversiones producto de asignaciones y licitaciones ejecutadas de forma ininterrumpida año con año, cualquier retraso en los planes se pagará con escasez en el futuro” remarcó.