Xalapa | 2023-09-04
El primer partido de béisbol en México se realizó en Xalapa, Veracruz, en plena euforia del Ejército Invasor de Estados Unidos por las traiciones al interior del Ejército mexicano en el campo de batalla en Veracruz y con la pierna de madera de Antonio López de Santa Anna usada como bate.
El Parque de Los Berros fue el escenario.
La historia, a menudo más extraña que la ficción, revela episodios tan insólitos como el primer partido de béisbol en Veracruz y el país.
La escena de este peculiar encuentro se desarrolló en Xalapa, en plena efervescencia de la intervención estadounidense en el país y con una pierna prostética del xalapeño Antonio López de Santa Anna como protagonista.
Los hechos se desarrollaron en medio de los convulsos años de la Guerra México-Estados Unidos que se prolongó desde 1846 hasta 1848.
Cuando las tropas norteamericanas avanzaban hacia la Ciudad de México, arrastrando la sombra de la intervención, Xalapa se convirtió en un punto crucial en su ruta.
Antonio López de Santa Anna, un xalapeño que había perdido una pierna durante la Guerra de los Pasteles en 1838, estaba listo para enfrentar a los invasores en la batalla de Cerro Gordo, Veracruz.
Su estratagema era hacer creer a los estadounidenses que se retirarían, para luego emboscarlos con la caballería mexicana.
Sin embargo, el destino le tenía reservada una traición. Miembros de su propio ejército revelaron una ruta oculta a las fuerzas de Winfield Scott, permitiéndoles atacar por sorpresa.
El xalapeño Santa Anna, sorprendido y derrotado, tuvo que retirarse precipitadamente, dejando atrás sus pertenencias, incluyendo su famosa pierna protésica.
Era el 18 de abril de 1847, una fecha que quedaría grabada en la historia.
Los estadounidenses, enarbolando la pierna de Santa Anna como un peculiar trofeo de guerra, avanzaron sin resistencia hasta Xalapa.
Al día siguiente de su victoria, ocuparon el Parque de los Berros, hoy un icónico pulmón verde en Xalapa.
Allí, con la pierna protésica como improvisado bate, comenzaron a jugar béisbol.
Arrojaban objetos de su botín de guerra y los bateaban con la pierna de madera de Santa Anna, jugando el primer partido de béisbol en la historia de México.
Este episodio, registrado por Thomas Phillip Terry en su "Terry's Guide to Mexico: Handbook for Travellers" en 1909, describe una escena que se convertiría en parte de la herencia cultural de Xalapa.
Pero la historia no termina ahí.
La guerra continuó su curso y culminó con la toma de la Ciudad de México, donde se erige el Castillo de Chapultepec, cuyos muros albergan la memoria de los Niños Héroes.
Mientras tanto, la pierna de Santa Anna fue llevada por los estadounidenses como botín de guerra y actualmente se exhibe en el Museo Militar del Estado de Illinois en Springfield.
Esta pierna protésica ha sido objeto de disputas entre México y diversos museos en Texas, pero el teniente coronel Brad Leighton, director de asuntos públicos del departamento de asuntos militares de Illinois, ha sido enfático: la pierna no se moverá del museo. "Para nosotros no es negociable", ha declarado.
Así que, aunque la pierna de Santa Anna permanezca en tierras extranjeras, su historia persistirá en la capital de Veracruz cada vez que una pelota vuele por el diamante.