Xalapa | 2024-04-14
José Alfredo González, un taxista de 65 años con 45 años de experiencia, perdió la vida al ser impactado por una camioneta Frontier conducida por un joven de 18 años sin licencia de conducir, en una zona urbana donde el límite de velocidad es de 60 kilómetros por hora.
Sin embargo, la camioneta circulaba a más de 110 kilómetros por hora según el dictamen de un perito externo contratado por la familia del ruletero. A pesar de las evidencias que apuntan al joven como responsable del accidente, la Fiscalía General del Estado (FGE) atribuyó la culpa al taxista fallecido.
Por esta razón la familia denunció irregularidades en la investigación de la FGE, señalando que los peritajes realizados por la institución son deficientes y sesgados a favor del conductor de la camioneta.
De esta manera procedieron en contra el Director de Servicios Periciales, Héctor Ronzón García, así como en contra del jefe de los peritos de criminalística, Alexei Díaz Rangel y los dos peritos que hicieron el dictamen, Hiram Blanco Mora y Manuel Antonio Mirón Rebolledo, incluyendo al perito de la policía vial que también emitió un dictamen sentando hechos falsos.
Lo anterior debido a que el peritaje externo revela que la camioneta Frontier circulaba a una velocidad considerablemente superior a la permitida y que no realizó ninguna maniobra de frenado antes del impacto. Además, existen videos que corroboran esta información.
En entrevista, los familiares señalaron que tres testigos del accidente declararon que el taxista cruzó la avenida cuando la camioneta aún se encontraba lejos, pero que debido a la alta velocidad a la que circulaba, fue impactado por el joven conductor de la camioneta.
Por esta razón exigen una investigación imparcial y que se responsabilice al verdadero culpable del accidente. Además, impugnaron el dictamen de la FGE y presentaron denuncias por su presunto mal desempeño.
El accidente ocurrió el pasado 11 de febrero en la entrada del fraccionamiento La Pradera en Emiliano Zapata. El impacto provocó que el taxi saliera impulsado hasta alcanzar la malla perimetral de la Universidad Euro Hispanoamericana. La camioneta Frontier también resultó severamente afectada y hubo daños al plantel educativo.
Este nuevo peritaje reveló que el conductor de la camioneta, un joven de 18 años sin licencia de manejo, circulaba a una velocidad inmoderada, estimada en al menos 111.29 kilómetros por hora. Además, el peritaje externo concluyó que el joven pudo haber evitado el choque manteniendo su carril original.
Por su parte, la Fiscalía concluyó que la camioneta circulaba a menos de 80 kilómetros por hora, contradiciendo los testimonios de testigos. El impacto fue tal que el taxi fue impulsado varios metros, alcanzando la malla perimetral de la Universidad.
La familia de González, en desacuerdo con las conclusiones de la Fiscalía, decidió hacer público el caso y buscar justicia.
Además, los familiares señalan errores en la investigación de la Fiscalía, como la clasificación del lugar del accidente como una "zona no urbana", a pesar de la presencia de centros comerciales y un plantel educativo en la zona, donde el límite de velocidad es inferior a 60 kilómetros por hora.
Los testigos del accidente coinciden en que la camioneta circulaba a alta velocidad y que el taxista cruzó confiando en la distancia que lo separaba de la camioneta. A pesar de los esfuerzos de los testigos por ayudar y llamar a la policía, los jóvenes de la camioneta mostraron nerviosismo e incluso intentaron evitar la intervención policial.
Arturo Nicolás Baltazar, asesor jurídico de la familia, busca exonerar al taxista e impugnó el dictamen de la Fiscalía. "Vamos a proceder penalmente contra ellos por su mal desempeño y omisiones", aseguró.