Xalapa | 2021-08-19 | Bibiana Varela
Jaranero de nacimiento y violinista por convicción, así es Camil Meseguer Rioux, quien desde muy pequeño se adentró en las mieles del Son Jarocho, hasta abrirse paso en el mundo musical con el grupo Sonex.
Su padre fue quien lo presentó al Son Jarocho y lo introdujo en un mundo que, poco a poco, se fue convirtiendo en su más grande pasión.
Camil comenzó a tocar la jarana desde la infancia; sin embargo, cuando llegó a la adolescencia supo que su talento daba para más, por lo que junto con sus compañeros de bachillerato, Helio Martín del Campo y Jerónimo González García, y su ya amigo Luis Felipe Luna Farías, decidió dar el gran paso y fundar su propio grupo musical que representara lo que estaban tocando a esa edad.
Fue así como, en 2004, nació Sonex, un grupo con un estilo muy característico que reinventó el Son Jarocho.
Con Sonex, Camil comenzó tocando en bares de Xalapa y poco a poco fue participando en encuentros de jaraneros... hasta que llegó uno que le cambió totalmente la vida.
En 2005 acudieron a un encuentro de jaraneros en Tlacotalpan, que los catapultaría a la cima del éxito.
"Fue muy fuerte la reacción y, a la semana, ya teníamos una propuesta para hacer un disco y giras... fue todo muy rápido.
Comenzamos a trabajar con nuestra música, conocimos a Rubén, de Café Tacuva, gente que admirábamos mucho, gente de la industria de la Ciudad de México, fuimos al Vive Latino, festivales de Jazz, festivales de Blues, festivales de Rock, festivales folclóricos, encuentros de jaraneros...", relató.
El violinista y fundador de Sonex sabía que nada era gratis, por lo que continuaron trabajando duro hasta llegar a escenarios internacionales en Haití, Israel, Rusia, Alemania, Estados Unidos, Chile, entre otros países.
El trabajo no dejó de llegar y verse en la misma cartelera junto con grandes artistas, era un sueño para Camil.
"Era muy difícil que hubiera dos semanas en las que no tocáramos", dijo. Sin embargo, la pandemia de Covid-19 llegó a romper ese ritmo acelerado que mantuvieron durante 16 años.
Actualmente atiende su negocio La Casa de Nadie, un café y espacio cultural ubicado en el Centro de Xalapa, donde aguarda el momento de regresar a los escenarios y volver a hacer vibrar al público con Sonex.