Veracruz | 2023-05-05
La Torre Pediátrica de Veracruz acumula un historial de corrupción, malos manejos y quejas desde que inició su construcción y que, con el paso de cuatro gobernadores, de diversos partidos políticos, no puede resolver.
El escándalo más reciente que exhibió el presunto mal manejo del inmueble fue denunciado por el personal el 17 de abril, después de que tres enfermeras resultaron lesionadas luego de que el elevador en el que se encontraban cayó varios pisos.
Lo anterior solo revivió el negro historial de la Torre Pediátrica. Al arranque de su construcción, el Hospital Pediátrico tenía una inversión inicial de 142 millones de pesos, de un total de 244 millones a invertir en 2010.
Cuando se acercaba el último año de Duarte de Ochoa se estimaba –según una solicitud de transparencia– un costo total de 667 millones de pesos, ya contando los sobreprecios y el equipamiento del inmueble.
Fue en 2015 cuando la obra fue detenida por insolvencia financiera y señalamiento de desvío de recursos, tanto por la Auditoría Superior de la Federación (ASF), como del Órgano de Fiscalización. Su construcción fue concluida para el gobierno del panista Miguel Ángel Yunes Linares, a pesar que quedó exhibida la mala calidad de sus materiales.
En 2008 el Gobierno de Veracruz anunció la construcción de un edificio de especialidades médicas para niños, con una inversión de 244 millones de pesos. Se informó que serían 10 niveles y una superficie de 14 mil metros.
En 2009, diputados federales priistas y el exgobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán, continuaron con las gestiones, pero el exgobernador Javier Duarte, dejó la obra inconclusa en su gobierno. Incluso se ordenó demoler dos pisos y quitar la construcción de un helipuerto.
La Torre Pediátrica comenzó a ser construida por el exgobernador Fidel Herrera Beltrán con una inversión de 75 millones de pesos. Aunque la administración de Duarte tenía que invertir 190 millones de pesos, se ejercieron 340 millones de pesos, pero el hospital continuaba con irregularidades.
Fue la extitular de la Secretaría de Protección Civil, Yolanda Baizabal Silva, quien informó que los pisos 9 y 10 y el helipuerto de la Torre Pediátrica de Veracruz, serían demolidos debido a su mala calidad.
Informó que, en el caso de los niveles inferiores, su infraestructura tenía que reforzarse a fin de evitar que se desprendieran más elementos, como ocurrió por los vientos provocados por el paso del frente frío número 45, en ese entonces.
En 2017 detuvieron al empresario constructor de la compañía Gran Marca Proyecto S.A. de C.V., César Augusto Morando Turrent, quien estuvo a cargo de la construcción de la Torre Pediátrica.
Fue detenido por el delito de fraude por 72.5 millones de pesos, durante la administración del panista Miguel Ángel Yunes Linares. Se le acusó de no concluir con la obra de rehabilitación. En noviembre de 2018 salió en libertad cuando ganó un amparo federal.
En ese mismo año el entonces gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, reinauguró lo que ahora se llama Hospital Infantil de Veracruz e informó que se invirtió 400 millones de pesos en el proyecto.
Se destacó la reconstrucción de las fachadas y estructuras que en 2017 fueron destruidas por las rachas de un frente frío, lo que evidenciaba un material de construcción de mala calidad.
En octubre 2019 el gobernador del estado, Cuitláhuac García Jiménez, informó que investigarían la adquisición de equipo médico defectuoso durante el gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares, recordando las fallas que presentó la Campana de Flujo Laminar que era utilizada en el tratamiento de niños con cáncer que eran atendidos en la Torre Pediátrica.
El 21 julio de 2022, trabajadores del Hospital Regional de Veracruz, acusaron que no funcionaban los climas en área de quemados, comedor y piso covid; además, presentaban fallas las calderas, los plafones se estaban cayendo y en lugar de mantenimiento el dinero se invirtió en cámaras de seguridad.
Señalaron que el área de los quirófanos pasó cerca de 5 días sin clima, debido a que los chillers (clima general) se descompusieron; se tuvo que instalar mini split para hacer frente al calor. Las afectaciones en los equipos fueron por falta de mantenimiento y desinterés de las autoridades del hospital, acusaron.
Por la falta de mantenimiento, el cuarto de máquinas, incluso, sufrió inundaciones. Además, no se contaba con agua caliente, por los problemas en las calderas.
Hubo una fuga de gas en ese entonces, que ocasionó una evacuación del hospital y los trabajadores comentaron que fue provocado por personas que acudieron al hospital a instalar cámaras de vigilancia en urgencias pediátricas y perforaron con el taladro la tubería.
Las denuncias por los desperfectos en la Torre Pediátrica por falta de mantenimiento más recientes ocurrieron el mes pasado, cuando tres enfermeras denunciaron que se lesionaron cuando cayeron en el elevador del Hospital Infantil, incluso siguen siendo atendidas en el Hospital del ISSSTE.
/oh