Veracruz | 2020-12-09 | Cristian Pulido Pérez
Desde inicios de diciembre, al igual que los vendedores de pinos de navidad, los comerciantes de San Gabriel Chilac, Puebla llegan a la ciudad de Veracruz para vender los típicos trajes infantiles de indito de cara al 12 de diciembre, día que se celebra a la Virgen de Guadalupe y se fotografía a los infantes.
Nancy, Cecilia y Valentín son tres de los más de 10 comerciantes que rodean el mercado Hidalgo todos los años ofertando dichos atuendos. Pero los tres saben que este no será el mejor año de venta debido a la pandemia.
Con 3, 7 y hasta 8 días de haber llegado a la ciudad de Veracruz, en otros años, las ventas eran muy buenas, pero hoy, todos han vendido de poco a “más menos”.
“Ha habido poco movimiento, la gente compra más que nada para la tradición y muchas personas dicen que si no hay bendiciones pues van a tomar las fotos en la casa junto con la imagen por la tradición y la Fe que tienen a la virgen”, platica a Imagen del Golfo Nancy Valdivia.
Desanimados y esperanzados
Para don Valentín Valdés las ventas hasta ahora este año cayeron más de la mitad a comparación con otros años, doña Cecilia Lezama coincide con él que hoy la ganancia es 50% menos que el año pasado.
Los tres, al igual que la mayoría, al saber que éste no es un año que dé mucha esperanza, tuvieron que invertir en menor cantidad de mercancía, Nancy sólo trabajó con el 30% de lo que trabajaba antes, don Valentín sólo trabajó con el 40% de volumen y doña Cecilia quien tiene 20 años viniendo a vender a Veracruz, sólo trabaja con el 20%, pues sólo invirtió para completar lo que le quedó del año pasado.
“Acá en la iglesia del Cristo, me comenta la señora que participa ahí que el padre empezó a dar las bendiciones desde el día de ayer después de misa de 7 de la noche hay ya bendiciones para los niños y el mero día también va a estar dando bendiciones”, comenta doña Cecilia quien al igual que sus dos paisanos tienen esperanzas de que las ventas levanten un poco de aquí al viernes.
En apoyo a la economía familiar, los precios no se elevaron y los trajes tanto de niños como para niñas fluctúan entre los $160 a los $180 dependiendo la talla. A pesar de que la zona de mercados tiene un “mar” de gente ya y el clima mejoró, las ventas no son como las de otros años.