Xalapa | 2024-07-16
La tarde del lunes un padre minusválido y su hijo recién operado fueron agredidos a golpes y patadas por los encargados de las grúas M2, por el solo hecho de reclamar el alto costo de arrastre y encierro y pedir que les dieran un comprobante, Elementos de Seguridad Pública llegaron y se pusieron a favor de los agresores.
Todo sucedió la tarde del lunes cuando el señor Jair Olivo (discapacitado) acompañado de su menor hijo Héctor Alejandro Olivo, acudieron al corralón de las grúas M2 ubicado en la colonia Revolución a intentar de recoger su automóvil luego de un accidente vial donde ellos fueron agraviados.
Pero los responsables del corralón de grúas M2 les cobraban casi 5 mil pesos argumentando que se hicieron maniobras complicadas para el arrastre, hecho que negó Jair Olivo, explicando que su vehículo incluso fue maniobrado por él mismo para subirlo a la plataforma de la grúa.
Señaló Jair Olivo, que obtuvo como respuesta amenazas de los empleados y burlas contra su condición física, exigió entonces una factura por el monto del costo total, advirtiéndole el encargado del corralón que la empresa no entrega ningún tipo de comprobante y mucho menos factura elevando aún más las agresiones.
Las amenazas subieron y el menor reclamó a los empleados respeto para su padre y cesaran las burlas contra su discapacidad.
En respuesta los trabajadores de las grúas M2 sin importarles que fuera un niño lo derribaron y lo patearon en el abdomen, pese a los reclamos de su padre quien les dijo que el niño estaba recién operado golpeando entonces al señor Jair en repetidas ocasiones entre todos los empleados y los encargados del encierro.
Algunas personas que fueron testigos de la ocurrido pidieron el auxilio de la policía sin embargo al llegar las patrullas, lejos de auxiliar al niño y su padre se saludaron con los trabajadores de corralón y pidieron que solo se retiraran para que terminara el problema.
El señor Jair Olivo pidió la detención de los agresores de su hijo, sin embargo, los policías estatales se negaron a hacer detención alguna y simplemente pidieron a los responsables de las Grúas que se metieran a su negocio y a las demás personas que se retiraran.
Ante todos estos abusos e incumplimiento del deber de los policías, el señor Olivo y su hijo acudieron ante la Unidad de Atención Temprana de la Fiscalía General de Justicia para denunciar los hechos constitutivos de diversos delitos.
Después de recibir su declaración ante la Fiscalía el menor tuvo que ser internado a un hospital debido que comenzó a sentirse mal.
No es la primera vez que ocurre este tipo de abusos, delitos y excesos cometidos por la empresa M2 que recibe protección de las mismas autoridades policíacas en Xalapa.
Jair Olivo, exige justicia por la agresión que fue objeto su hijo que pone en riesgo su vida, de ser necesario se manifestara frente a palacio de Gobierno, pidiendo al gobernador su intervención porque se vio muy claro que esta empresa está muy protegida por Seguridad Pública.