Ciudad de México | 2024-01-26
Un grupo de 20 niños, de entre 12 y 17 años, ha tomado medidas extremas al unirse a las autodefensas en México. Vistiendo uniformes militares y portando armas, estos jóvenes fueron juramentados por la policía comunitaria en medio de la preocupación por el secuestro reciente de cuatro personas en su lugar de origen.
La policía comunitaria, que ha enfrentado durante años a los cárteles de la droga y organizaciones criminales, ha justificado esta drástica medida.
De acuerdo con un reportaje del diario español El País, el reclutamiento se registró en Ayahualtempa, Guerrero. La policía comunitaria, establecida hace 28 años por pobladores de 16 municipios del sureste de Guerrero y miembros de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias y Pueblos Fundadores (CRAC), tomó juramento a estos nuevos integrantes.
Levantaron armas en un gesto militar. La CRAC, en defensa de la medida, aseguró que los menores se dedicarán exclusivamente a tareas de vigilancia.
El secuestro de una familia el 19 de enero, atribuido al grupo criminal Los Ardillos, motivó a la CRAC a tomar medidas ante la falta de resultados en las operaciones de las fuerzas estatales y federales para localizar a los secuestrados.
La inseguridad también afecta otras áreas de Guerrero, donde grupos del crimen organizado, como La Familia Michoacana y Los Tlacos, han paralizado actividades en la localidad turística de Taxco.
Además, Acapulco enfrenta problemas con el transporte público debido a la renuencia de los trabajadores a regresar a sus puestos debido a la violencia y las amenazas.