México | 2022-08-20
Así como la vida de los seres humanos da muchas vueltas, la vida de los lomitos también. Este es un claro ejemplo.
Perros que fueron entrenados en los Estados Unidos y que se dedicaban a detectar drogas y aparatos explosivos fueron ‘reciclados’ por cuerpos de seguridad mexicanos, especialmente en las cárceles.
Es bien sabido que al interior de estos centros de reclusión se encuentra de (casi) todo, y la presencia de los canes era necesaria para detectar algo muy específico: teléfonos celulares y otros aparatos electrónicos.
Desde 2020 fue creado el grupo K9 Penitenciario, una especie de unidad SWAT de cuatro patas, cuya tarea es tratar de disminuir las extorsiones que se efectúan desde dentro de las cárceles, algo que los inhibidores de señal no han logrado conseguir a pesar de su alto costo.
A la fecha son 18 los lomitos que conforman este grupo de elite dentro del sistema penitenciario, y se sabe que han logrado incautar más de mil 500 aparatos de telefonía durante los operativos en que han participado.
Los perros de la raza Pastor Alemán están entrenados para detectar componentes como litio, polímeros y otros metales que integran los celulares; además que no olvidan su entrenamiento original y pueden olfatear al menos cinco tipos de drogas.
Y que su tranquilo y peludo aspecto no te engañe, pues estos tiernos policías saben cómo reaccionar en caso de cualquier eventualidad. No es una mala vida para un lomito, pues una buena recompensa de croquetas y muchas caricias los espera al final del día.