Ciudad de México | 2024-04-11
El consultor jurídico de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Alejandro Celorio, manifestó que el Gobierno de México acusó que su par ecuatoriano intervino en las comunicaciones de la Embajada en Quito, antes de la irrupción de fuerzas de seguridad.
Lo anterior, al dar los pormenores de la denuncia ante la Corte Penal Internacional (CPI) en el salón de la Tesorería de Palacio Nacional.
Celorio Alcántara afirmó que con "mucho orgullo" se presenta ante la CPI la solicitud de inicio de procedimientos, y desgranó las violaciones que cometió el Gobierno de Ecuador, entre las cuales se encuentran:
Las afirmaciones del consultor jurídico de la cancillería, se reflejan en la propia denuncia ante la CPI, en la que se da constancia de que el jefe de Cancillería, notó horas antes de la irrupción:
"Que un vehículo militar táctico estaba estacionado afuera de la Embajada de México; Al compartir sus inquietudes y una fotografía del vehículo a miembros de la Embajada, mencionaron que se trataba de un vehículo militar utilizado para intervenir comunicaciones celulares".
Asimismo el día de la irrupción, los diplomáticos no pudieron utilizar sus celulares, probablemente debido a la interferencia del vehículo militar" y que:
Por otra parte, Celorio Alcántara también mencionó que hay personas que buscan: "un equilibrio en violaciones", con base en que México habría violado las convenciones de asilo, lo que justificaría la irrupción en la misión:
El asesor jurídico de la Cancillería dijo que, a quienes recurren a un presunto "derecho a la fuerza", el Gobierno Mexicano responde "con la fuerza del derecho".
A su vez, la canciller Alicia Bárcena detalló que la solicitud de inicio de procedimiento busca que:
Además de que con dicho procedimiento se pretende poner a prueba al sistema de justicia internacional ya que se vive "un momento de suma debilidad en el mundo multilateral y en las relaciones internacionales".
El 5 de abril la Policía Ecuatoriana irrumpió en la Embajada en Quito, y arrestó al exvicepresidente Glas, acusado de presunta corrupción.
La decisión del gobierno de aquella nación llevo a la ruptura -por parte de México-, de las relaciones diplomáticas, además de que varias naciones del continente, incluidos Estados Unidos y Canadá, así como países miembros y la Unión Europea, reprobaron la decisión de la administración del presidente Daniel Noboa.