Sicario atenta contra jueza encargada de caso relacionado a Epstein y Deutsche Bank

Estados Unidos | 2020-07-20 | Agencias

Un hombre abrió fuego este domingo en el domicilio de Esther Salas, una jueza federal de New Jersey a la que recientemente se le encargó la dirección de un juicio contra Deutsche Bank por, entre otras cosas, no supervisar las transacciones problemáticas de Jeffrey Epstein, el millonario que traficó sexualmente con decenas de menores. En el incidente murió el hijo de la jueza, de 20 años, y resultó herido su marido. La magistrada salió ilesa del asalto. Este lunes, se ha encontrado el cuerpo sin vida de un hombre sospechoso de haber perpetrado el crimen. La policía dio con el cadáver en un lugar a dos horas de distancia del domicilio de Salas en North Brunswick y, según la CNN, apuntaba a haberse disparado a sí mismo. Fuentes policiales aseguraron a «The Washington Post» que el hombre encontrado muerto es un abogado y que el FBI, los US Marshals -el cuerpo de seguridad dedicado a la administración de justicia- y la policía local están investigando el incidente.

El asalto al domicilio de Salas fue, al parecer, premeditado. El asaltante iba vestido con el uniforme de la compañía de correos Fedex. Poco después de las cinco de la tarde del domingo, llamó a la puerta y disparó al marido de Salas, Mark Anderl, y a su hijo Daniel, que falleció al instante por un impacto que le atravesó el corazón. Su esposo fue trasladado al hospital, donde este lunes por la tarde estaba estable y fuera de peligro.

 
 

Las autoridades no tienen sospecha de momento de cuáles podrían ser el motivo del ataque a la familia de la jueza y de la muerte del sospechoso. Salas, de 51 años, fue la primera mujer hispana en conseguir una plaza de jueza federal en New Jersey, un cargo a la que fue propuesta por el presidente Barack Obama.

Hace cuatro días, recayó en el juzgado de Salas un caso contra Deutsche Bank: una demanda colectiva en la que un grupo de inversores exigen una indemnización del banco por no supervisar de forma eficiente transacciones dudosas, entre otras, las de clientes de «alto riesgo» como Epstein.

La tragedia en la familia de la jueza añade una capa de turbiedad alrededor de Epstein, que falleció el año pasado en una prisión de Nueva York a la espera de juicio. Su muerte se decretó como suicidio, pero la familia ha defendido que fue asesinado y especuló con los intereses de la elite política y empresarial que el financiero tenía alrededor. Mientras Epstein abusaba de menores, labró relaciones estrechas con figuras como el expresidente Bill Clinton, el príncipe Andrés de Inglaterra o Alan Dershowitz, un célebre abogado y profesor de Harvard.