Misantla | 2024-08-11
La producción de naranja ha experimentado una drástica caída desde 2022; este fenómeno, que ha reducido la producción en un 50 por ciento, ha puesto a los agricultores en una encrucijada.
La caída es atribuible a una serie de plagas que han azotado los huertos y han llevado a muchos productores a considerar seriamente el cambio de cultivo.
Claudio César Belli Celis, productor citrícola y exdirector de Fomento Agropecuario, dijo que la situación no está confinada a la zona baja de Misantla, sino que también afecta a otras regiones de Veracruz y estados vecinos.
Las enfermedades como el Huanglongbing (HLB) y un mal conocido como "amarillamiento" están devastando los huertos.
El HLB, transmitido por una especie de insecto, ha causado estragos en la producción de cítricos a nivel mundial; el "amarillamiento", por otro lado, sigue siendo un misterio, sin causa identificada ni tratamiento efectivo.
El impacto económico de esta crisis es considerable; la disminución en la producción ha llevado a un aumento en los precios de la naranja, alcanzando hasta 30 mil pesos por tonelada.
Esta subida de precios, aunque beneficiosa para los pocos productores que aún cosechan, no compensa las pérdidas acumuladas y el cambio de cultivo forzado.
Belli Celis señala que muchos agricultores están abandonando sus huertos de naranja para cultivar otros productos más resistentes a enfermedades o con una mejor rentabilidad.
A pesar de numerosos estudios no se han encontrado soluciones efectivas para combatir estas enfermedades. Los investigadores y autoridades locales están trabajando en posibles tratamientos y métodos de control, pero el proceso es lento y los resultados aún no son prometedores.
Por ahora, la comunidad citrícola se enfrenta a un futuro incierto, y la falta de soluciones rápidas pone en peligro la continuidad de una tradición agrícola que ha sido vital para la región.