Minatitlán | 2020-07-16 | Mario Zepeda
Ni siquiera el cubrebocas pudo ocultar el dolor tan inmenso de doña Silvia Alpuche, su mirada, sus lágrimas, el tono de su voz revivió todo lo que sintió aquel 15 de agosto del 2019 cuando apareció el cuerpo calcinado de su hija Silvia Jazmín, en un basurero clandestino de la carretera Cosoleacaque-Nuevo Teapa.
"Ustedes no se imaginan como no las entregaron, lo que nos entregaron de ella", dijo mientras sus lágrimas escurrian y la abrazaban quienes la acompañaron al reclusorio de Coatzacoalcos donde fue trasladado Aldo N, ex novio y principal sospechoso del crimen.
“No se imaginan lo que es estar aquí, porque hoy puede ser mi hija, mañana puede ser la tuya o la de ustedes, mi hija no se metía con nadie, era una niña amorosa productiva, compartida", declaró.
Se describió como una mamá dolida, con un corazón destrozado y aunque dijo desconocer de leyes clama justicia para que el caso de su única hija no quede impune.
"Yo siempre me pregunto porqué, porqué le hicieron esto a mi única hija, dónde, cómo ultimaron a mi niña", repitió y no pudo contener el llanto, se disculpó y se alejó de los diferentes medios de comunicación que cubrían la llegada de Aldo.
ALDO PERMAMECE EN PRISION PREVENTIVA.
Aunque con una imagen diferente a la difundida en fotos de su búsqueda, cabello largo y bigotes Aldo N de 32 años fue detenido con su camiseta favorita, una negra con la imagen al frente del caballero de la noche, Batman con la que solía posar para sus redes.
Después de dos horas de la audiencia inicial de legalización de detención en el juzgado del distrito judicial de Coatzacoalcos, el presunto feminicida fue puesto a prisión preventiva mientras se cumple el término constitucional.