Orizaba | 2021-05-30 | Nora Gabriela Lira
Si bien es cierto que el lenguaje se enriquece, el tema de la inclusión debe ser motivo de análisis para ver hasta dónde se quiere llevar, sin llegar a desvirtuarlo ni pecar de machismo, consideró el analista político Juan Hernández Mercado.
Mencionó que recientemente el director de la Real Academia de la Lengua (RAE) consideró que el lenguaje incluso "afea el idioma de manera insostenible", y en diciembre del 2020, la RAE consideró que el uso de la letra "e" como supuesta marca de género es ajeno a la morfología del español e innecesario.
"Desde finales del siglo XX en el caso de México se sentía la presión para la inclusión del género en nuestro lenguaje y desde luego sólo hacía falta la llegada de un personaje como Vicente Fox a la presidencia para que se pudiese a decir sus ellos, ellas, niñas, niños, las, los, jueces, juezas, magistrados, magistradas, ministros, ministras, abogados, abogadas, licenciados, licenciadas, arquitectos, arquitectas", indicó.
Desde luego, abundó, la pobreza del lenguaje de ese presidente no daba para tanto; sin embargo, si bien es cierto que el lenguaje se enriquece, también lo es que puede ser llevado a los extremos y con esto alterar toda la narrativa escrita e incluso todas las formas de expresión sonora y audiovisuales.
"Sólo pensemos en cualquier obra que esté calificada de clásica dentro de la literatura o en un corrido de la Revolución Mexicana, el cual en estos tiempos sería fácil calificar de machista por no incluir al género femenino y que en aras de la igualdad, que es un reclamo justo, nos pusiésemos a incorporar las adiciones correspondientes al género", acotó.
Hernández Mercado consideró que será difícil hacer un alto en el camino, ya que esta opinión particular puede ser calificada de "machista" y excluyente, alejándola del problema de fondo, el cual es hasta dónde se debe llegar en el lenguaje incluyente de género, pues si bien hoy se reclama el género femenino, es posible que mañana sea reclamada esta inclusión por el sector LGTTTIQ, el cual también sería justo en términos de equidad.
El analista político comentó que un ejemplo hipotético de inclusividad extrema podría ser con el Himno Nacional, el cual dice:
"Mexicanos al grito de guerra,
el acero aprestad y el bridón..."
En el ánimo de hacerlo inclusivo quedaría:
"Mexicanas, mexicanos al grito de guerra
el acero aprestad y el bridón..."
Así, indicó, se acabaría con la métrica pero ganamos en equidad, pero si se lleva a un extremo sería:
"Mexicanas, Mexicanos, Transexuales...,
todas y todos al grito de guerra,
el acero aprestad y el bridón..."
"Aclaro no es ningún momento mi intención faltarle al respeto al himno nacional solo mostrar un ejemplo de lo que pudiese ser la inclusión extrema de género en su más amplio sentido", puntualizó.