Córdoba | 2024-03-19
Con un sistema climatizado a 24 grados y otras medidas, se cuida el reloj que se ubica en el Palacio Municipal de Córdoba, el cual tiene más de 120 años de antigüedad y es único en su tipo en la zona.
Gregorio Carlos Herrero Velasco, un experto relojero de 70 años de edad, es quien se encarga de dar mantenimiento a esta pieza de valor histórico. De acuerdo con este relojero de abolengo, este reloj fue hecho por encargo del expresidente Porfirio Díaz.
Explicó que muchas piezas fueron hechas a mano y se tiene un estimado de que se requirieron unas 3 mil horas hombre y la participación de unas diez personas, pues tan solo los pernos se tuvieron que poner uno por uno.
Mencionó que algunas de las alrededor de 600 piezas del reloj están hechas con una aleación de cobre, bronce y plomo y se pueden limpiar para que no estén imantadas.
Comentó que cada tres o cuatro días se le da cuerda; además, es muy difícil poner a tiempo la carátula y cuando se hace una reparación se debe tener mucho cuidado y bajar algunas piezas, pues aunque tiene un trabador, se corre el riesgo de que a la persona se le vuelen los dedos.
Explicó que a todos los relojes los altera la temperatura, por eso se requiere que permanezca a una temperatura constante de 24 grados, pero aun así lo llega a afecta el calor o el frío y se adelanta o atrasa unos dos o tres minutos, pero sería más la diferencia si no tuviera el clima.
Destacó que esta pieza es todo un arte y se conserva prácticamente todo en original, aunque las campanas fueron hechas en España, pero así llegaron originalmente.
Otra característica, abundó, es que el número 4 se representa con cuatro barras, no en número romano.
Los paseantes pueden acudir y apreciar este reloj desde fuera, aunque el relojero confió en que este espacio pueda abrirse y así los visitantes puedan apreciar de cerca sus características.