Orizaba | 2021-10-03 | Nora Gabriela Lira
En lo que va de la pandemia, cuatro empleados del ayuntamiento han fallecido a consecuencia del COVID-19, y si bien actualmente los decesos van a la baja, nadie se puede descuidar, indicó el alcalde Igor Rojí López.
Señaló que en el municipio, el mes de septiembre cerró con 43 decesos, contra 60 de agosto, por lo que disminuyó la cifra, que venía a la alza.
Mencionó que en el ayuntamiento hay seis trabajadores más con la enfermedad, los cuales se encuentran aislados en sus casas pero que afortunadamente no tienen ningún riesgo.
Comentó que a la fecha, en las escuelas les han pedido alrededor de 22 análisis para niños que han presentado algún síntoma, lo cual ha permitido detectar cuatro casos positivos.
"Lamentablemente esta pandemia nos ha cobrado caro con familiares, con amigos, con muchísima gente que ha perdido la vida, el más reciente el delegado de Tránsito Carlos Rivelino Votte Ochoa", comentó.
Exhortó a vacunarse, pues consideró que este es el principal elemento para defenderse ante la pandemia.
Reconoció que hay personas que no se quieren vacunar, pero ya hay países en donde están haciendo prácticamente obligatoria la inmunización.
El alcalde invitó a la población a seguirse cuidando y a atender el llamado de las autoridades para acudir a las jornadas de vacunación que se abren en los diferentes municipios.
Cabe recordar que el pasado sábado 2 de octubre el ayuntamiento rindió homenaje póstumo al delegado de Tránsito, quien falleció a los 54 años víctima de complicaciones por el COVID-19.