´Y todo ¿para qué?´

Tiempos extra

Veracruz | 2022-12-01

-Se cimbra la estructura del balompié nacional

-A conciencia la forma en que se trabaja en el futbol mexicano

Tiempos reglamentarios

"Jugamos como nunca y perdimos como siempre", frase acuñada para exaltar el accionar del equipo mexicano en lo futbolístico, más no en el resultado.

Porque si bien México ganó a Arabia Saudita 2-1, al final en la diferencia de goles perdió ante Polonia la calificación a octavos de final de Qatar 2022, al combinarse la victoria de Argentina 2-0 sobre los polacos, es decir, Lionel Messi y sus amigos hicieron su tarea.

En el grupo "C" Argentina terminó, apurado y todo, con 6 unidades, Polonia fue segundo con 4, las mismas que acumuló México pero con peor diferencia de goles y Arabia Saudita, que arrancó con buenas sensaciones, se fue hasta el último escalón con 3 puntos.

Gerardo Martino asumió una posición más cercana a la realidad del futbol nacional, con una alineación más equilibrada, con un estilo de juego más ofensivo y mucho más identificado a nuestras raíces, garra, lucha y velocidad

Es un hecho, Gerardo Martino finalmente dejó a un lado sus necedades y apostó por la lógica, en el entendido que en el futbol no hay secretos.

Lástima que no alcanzó.

Primer tiempo extra

Al margen de lo que pasó con México en la tercera jornada del Mundial de Qatar 2022, la derrota 2-0 ante Argentina cimbró las estructuras de la Federación Mexicana de Futbol.

Y es que aunado al fracaso del balompié nacional por no calificar a los Juegos Olímpicos de París 2024 en ambas ramas, aún y cuando se logró medalla de bronce en varones en Tokio, el equipo mexicano dejó una huella difícil de borrar en Qatar acumulando cuatro partidos mundialistas sin marcar gol.

Desde Rusia 2018, México no le hizo gol a Suecia, después con Brasil ya en octavos fue la misma historia y ahora en Qatar se fue en blanco ante Polonia y le sumó el duelo ante Argentina.

Los goles se quedaron en casa, sí, aunque parezca trillado el tema, los dos primeros juegos en blanco de la selección necesariamente nos remite a la marginación de Javier Hernández y Santiago Giménez.

El asunto del Chicharito por más complejo que haya sido, al técnico nacional le faltó imponer su ley y en el caso de Giménez, simplemente a Martino se le nublaron las ideas y no lo llamó bajo el pretexto de que es joven y que ser goleador en la Europa League no competía con la experiencia de Funes Mori y de Raúl Jiménez.

En suma, todo se conjugó. La necedad del técnico nacional por dejar fuera a los goleadores y posteriormente, plantear estrategias tan temerosas buscando no perder en lugar de apostar a ganar.

Dijeran en mi pueblo, el Tata "se embriscó" y entre las espuelas se llevó al futbol

Segundo tiempo extra

La otra gran discusión estriba en si realmente las condiciones de nuestra liga ofrecen la solvencia para enfrentar dignamente un mundial, creo que no.

Desde el sistema de competencia que alcahuetea la mediocridad, hasta la presencia excesiva de extranjeros que le tapan, automáticamente, el paso a los juveniles, son temas que hay que poner sobre la mesa.

En realidad, son pocos los clubes que apuestan a sus fuerzas básicas y que le dan las facilidades a los mismos para emigrar al extranjero, otra gran apuesta que debe multiplicarse a partir de ahora.

Hay mucho que trabajar para que, en lo sucesivo esto no se repita, sobre todo en el Mundial del 2026 donde ni competencia en eliminatorias habrá.

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