Xalapa | 2024-01-18
Así como existen carreras universitarias para formar médicos, abogados, ingenieros, etc., etc., debería de haber universidades para capacitar a la clase política y los futuros servidores públicos para que estos funcionarios sean de carrera.
Dichos centros de estudios superiores deberían de ofrecer programas académicos enfocados a la administración pública, la ciencia política, economía y de manera especial a la ética para que sea la honestidad una prioridad del funcionario público.
Estas personas capacitadas permitirían que la sociedad confiara cuando toman importantes decisiones y que no estén trabajando para su beneficio o persiguiendo intereses personales o de grupos minoritarios.
Esta especialidad universitaria podría construir una clase política mejor informada y más comprometida para manejar los recursos públicos de manera más eficiente. Es necesario invertir en la formación académica y en la práctica de los burócratas y con ello construir un mejor gobierno de cualquier orden, municipal, estatal o federal. Para los candidatos a un cargo de elección popular para participar deberán tener una cédula profesional como cualquier egresado universitario.
Nos evitaríamos los graves problemas de personas que no saben gobernar como Carlos Salinas que entregó las empresas públicas a sus amigos o Ernesto Zedillo que desapareció los trenes de pasajeros, o de Vicente Fox y Felipe Calderón con sus acuerdos con los cárteles y el crimen organizado.
En el caso de los gobernadores de Veracruz existe cada caso como don Patricio Chirinos que no era originario del estado como tantos otros, el potosino se la pasaba todo el tiempo en los Pinos en la Ciudad de México por eso le decían "la ardilla", Javier Duarte lleva varios años en el reclusorio Norte purgando una pena de nueve años y Cuitláhuac García por mencionar a el trío de ejecutivos estatales con resultados que causaron un grave daño en lo social y económico a la entidad.
Con estas avanzadas universidades se formaría una nueva generación de líderes con un enfoque más sólido y con un compromiso genuino por el bienestar del pueblo.
Lo que está ocurriendo en el vecino estado de Oaxaca, para que no se confié el gobernador Cuitláhuac García, el gobernador de Morena, Salomón Jara, lleva a cabo una exhaustiva investigación sobre los recursos que manejó su antecesor el exgobernador priista, Alejandro Murat, a pesar de que renunciara al tricolor y se incorporara a la campaña presidencial de Claudia Sheinbaum.
No hay duda que van a hacer auditorías y las denuncias de gastos millonarios y de contratos a empresas creadas al vapor que existen en contra de varios funcionarios estatales son del dominio público y no puede haber complicidades porque son delitos que se persiguen de oficio.