Xalapa | 2024-05-07
Se desconoce quién es el que decide la estrategia electoral del PRIAN en el estado de Veracruz que está enfocada a destacar todos los aspectos negativos del gobernador Cuitláhuac García y ponerlo como ejemplo de lo que continuaría si llega a la gubernatura Norma Rocío Nahle. En primer término, son dos personas muy diferentes y con carreras políticas que no coinciden en nada. El actual gobernante no está en la boleta y para nada participa en ningún cargo de elección popular.
Se equivocan con esa campaña de denigrar al jalapeño que le quedan meses para irse, en lo que sí están acertados en que no critican al presidente López Obrador porque saben del arrastre popular que cuenta en su favor y las ofensas al mandatario mexicano las toman como si fueran personales.
Le dieron una amplia difusión a la visita del aspirante Pepe Yunes y de Miguel Yunes Márquez al puerto de Coatzacoalcos al que consideran feudo central de la izquierda en Veracruz, hasta pidió este último permiso para visitar al Diario del Istmo, el medio más importante de la zona sur, consciente de la independencia y pluralidad del periódico líder. Nunca se le cierran las puertas a ningún político del partido que sea y ese es el reconocimiento nacional que ostenta.
Las constantes visitas del presidente de México y de su posible sucesora Claudia Sheinbaum a la entidad veracruzana es la preocupación en Palacio Nacional sobre el futuro de un estado que es clave para las elecciones más competitivas que se recuerden.
Buscar que el candidato de MC, Hipólito Deschamps renuncie y se una al grupo integrado de los disminuidos Yunes rojos con los ambiciosos azules que sólo trabajan para su beneficio particular.
Un cambio en la estrategia que exige una nueva habilidad y pericia para recuperar el gobierno estatal; aliarse a MC es una muestra que los datos que tienen no les son favorables y el error se fincó en la carencia de un buen coordinador del proceso electoral y un jefe de prensa que evite el desorden existente que muestra que no existe una unidad entre el que busca la gubernatura y los quieren una posición legislativa para su futuro político.
El licenciado José Francisco Yunes sabe que esta campaña es su última oportunidad en su fructífera vida política y para ello requiere corregir el rumbo y asumir de manera decisiva la jefatura de este proceso.
Lo importante es tener el mando y hacerles saber que si llega a ganar la elección él será el gobernador y no va a permitir que alguien menosprecie su autoridad que le otorga el voto de los veracruzanos.
La autoridad es el equilibrio de la libertad y el poder.
De repente les dio a Miguel Ángel Yunes Linares y su candidato a senador, su primogénito de los mismos nombres darles por realizar conferencias de prensa y el tema sigue siendo el mismo tema sobre que existe una persecución política-judicial en contra de los candidatos del PRIAN a puestos de elección popular.
La manera tan reiterada y asegurar que la carpeta azul que existe sobre los graves delitos cometidos por él ya fue archivada por que se pasó de término y que el caso de las cámaras culpa al gobernador García Jiménez por no haber denunciado a la empresa que él contrato.
Esos Yunes azules no ayudan y si afectan la campaña de Pepe Yunes.
Estos eventos mediáticos que evitaban y ahora realizan, son los que evidencian su nerviosismo y que tienen temor de ser detenidos por las autoridades locales.