Xalapa | 2023-07-18
El mundo ha sido testigo de una tendencia creciente hacia la desdolarización, un fenómeno que desafía la hegemonía del dólar en el escenario global. Para comprender este cambio, es crucial remontarse a la historia del Sistema de Bretton Woods, establecido en 1944 tras la Segunda Guerra Mundial.
El Sistema de Bretton Woods estableció al dólar como la principal moneda de reserva, respaldada por el patrón oro, y fijó los tipos de cambio de las demás monedas en relación con el dólar. Esto permitió una estabilidad económica y un sistema comercial basado en reglas, impulsando la reconstrucción y el crecimiento después de la guerra.
Sin embargo, el Sistema de Bretton Woods comenzó a mostrar señales de debilidad en la década de 1960. El déficit en la balanza de pagos de Estados Unidos y el creciente gasto en la Guerra de Vietnam condujeron a un exceso de dólares en circulación. Además, la falta de suficiente respaldo de oro para el dólar planteó dudas en los países sobre su solidez.
Como resultado, en 1971, el presidente de Estados Unidos, Richard Nixon, suspendió la convertibilidad directa del dólar en oro, poniendo fin efectivamente al sistema de Bretton Woods. Esto abrió la puerta a los tipos de cambio flotantes y a una mayor flexibilidad en las políticas monetarias, exponiendo al mundo a la volatilidad y la incertidumbre en los mercados.
Con el tiempo, los países comenzaron a cuestionar su dependencia del dólar. Las crisis financieras globales, como la de 2008, y la continua emisión de dinero por parte de la Reserva Federal de E.U., han generado preocupaciones sobre la estabilidad y el valor del dólar. Los países buscan alternativas para protegerse de los riesgos asociados con el dólar y diversificar sus reservas internacionales.
Ha surgido una creciente tendencia hacia la desdolarización. Rusia y China han estado reduciendo gradualmente su exposición al dólar, diversificando sus reservas hacia otras monedas y activos, incluyendo el oro. La implementación de acuerdos comerciales pagados en monedas locales, ha ganado impulso en los últimos años, promoviendo una mayor independencia económica.
En medio de un panorama económico global en constante evolución, se ha desatado un debate en el seno de los países miembros de los BRICS sobre la desdolarización y las posibles alternativas al sistema de pagos dominado por el dólar. En particular, se ha especulado sobre la posibilidad de que el Grupo BRICS presente el yuan digital o e-CNY respaldado por oro, como un nuevo sistema de pago en la próxima cumbre que se llevará a cabo en agosto de 2023.
A medida que el mundo avanza hacia un sistema financiero y económico más multipolar, es probable que veamos una mayor diversificación de monedas y una menor dependencia del dólar. Sin embargo, el proceso de desdolarización es gradual y complejo, y su impacto completo aún está por verse, pero seguro ¡pasará!