Desdén a Nuevo Arzobispo

Veracruz | 2022-02-09 | Raymundo Jiménez

Unos porque profesaban la religión católica y otros porque sabían de la influencia de la Iglesia como poder fáctico, todos los gobernantes de Veracruz –con excepción del general anticlerical Adalberto Tejeda Olivares– siempre procuraron acercamientos y llevar una buena relación política y de respeto con la jerarquía eclesiástica.

Al menos así fue hasta la corta administración del exgobernador panista Miguel Ángel Yunes, quien desde la administración del exmandatario Patricio Chirinos (1992-1998), en la que se desempeñó como secretario general de Gobierno, inició una estrecha relación de amistad con el arzobispo Sergio Obeso. Sus antecesores, Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte, ambos del PRI, establecieron a su vez una eficaz interlocución con monseñor Hipólito Reyes Larios, sucesor de Obeso Rivera.

Elevada a Arquidiócesis el 19 de junio de 1951 por el Papa Pío XII –anteriormente había sido erigida Diócesis el 19 de marzo de 1863 por el Papa Pío IX–, la Iglesia xalapeña abarca una extensión territorial de 6 mil 137 kilómetros cuadrados en la zona centro del estado donde, según reporte del INEGI de 2019, habita 1 millón y medio de habitantes, dispersos en 36 municipios veracruzanos más el de Xiutetelco, perteneciente al estado de Puebla.

La Arquidiócesis de Xalapa cuenta con 92 parroquias distribuidas en 13 decanatos y tiene 156 presbíteros y un diácono, más los sacerdotes de órdenes religiosas, como las de los Legionarios de Cristo y los Benedictinos. Además están registradas alrededor de 19 congregaciones religiosas y dos institutos seculares: el de Legionarias de María Inmaculada y el de Adoratrices Eucarísticas Seculares.

Cuenta también con Seminario Menor y el Seminario Arquidiocesano “Rafael Guízar y Valencia”, que posee una área propedéutica, un Instituto de Estudios Superiores con la licenciatura en Filosofía y estudios superiores de Teología.

Además tiene 30 movimientos laicales inscritos en la Comisión Diocesana para el Apostolado de los Laicos, y 7 organismos de asistencia social: Casa Hogar Tepeyac, Casa de Jesús, Cáritas de Xalapa con sus albergues y un laboratorio de análisis clínicos, Centro de Ayuda para la Mujer, Resurrección de sordos, Obra Kolping y la asociación civil AHTECA, que apoya a enfermos de cáncer.

La Arquidiócesis está vinculada a 9 escuelas católicas particulares de educación básica y de educación media superior y superior: Colegio Guadalupe Victoria, Colegio Matel, Colegio Morelos, Colegio Pedro de Gante, Colegio Rafael Guízar Valencia, Colegio Rebolledo, Colegio Teresita, Instituto Científico Motolinía, Universidad Anáhuac y cuenta con dos escuelas diocesanas: Colegio México y Escuelas Morelos.

En la entidad, además de la Arquidiócesis xalapeña, la Iglesia católica está integrada por las diócesis de Coatzacoalcos, Córdoba, Orizaba, Papantla, San Andrés Tuxtla, Tuxpan y Veracruz.

Por eso sorprendió que, este martes, ni el gobernador Cuitláhuac García ni su secretario de Gobierno, Eric Cisneros, hayan asistido por mera cortesía política a la ceremonia de toma de posesión de monseñor Jorge Carlos Patrón Wong como Arzobispo de la capital veracruzana. O que al menos hayan hecho pública su congratulación por emprender este nuevo periodo episcopal.

¿Todavía existe la Dirección General de Asuntos Religiosos de la Segob?