Coatzacoalcos | 2023-08-19
En próximos días podrían llegar al sureste veracruzano más vagones para el Tren Interoceánico.
En un movimiento que promete transformar la movilidad y el comercio en el sureste mexicano, se espera la llegada de nuevos vagones para el Tren Interoceánico, proyecto que bajo la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador ha cobrado vida con celeridad.
Este sistema ferroviario, diseñado para el transporte de carga y pasajeros, está programado para iniciar operaciones en septiembre próximo.
Las redes sociales se han visto inundadas de videos que capturan el viaje inaugural de la primera locomotora del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec.
Las imágenes muestran el recorrido de la maquinaria por diversos municipios de Veracruz, como Soledad de Doblado, Paso del Macho, Atoyac, Potrero y Cuitláhuac, generando un entusiasmo palpable entre los residentes de estas localidades que han sido testigos de un acontecimiento histórico en sus propias vías férreas.
La iniciativa del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, impulsada por el Gobierno Federal, tiene como objetivo central dinamizar la economía y la vida social en la región que abarca Oaxaca, Veracruz y Chiapas.
Uno de los aspectos más destacados es la conexión entre los puertos de Salina Cruz y Coatzacoalcos, dos nodos clave en la actividad comercial del país.
El presidente López Obrador, en un acto simbólico, presentó una de las locomotoras en el puerto de Coatzacoalcos, la cual ostenta un emblema que homenajea a cuatro emblemáticas mujeres de Veracruz, Chiapas, Tabasco y Oaxaca, reflejando la diversidad cultural y regional que este proyecto pretende abrazar.
La locomotora que encabeza este ambicioso proyecto es una SD70M, fabricada por EMD en 2001 y recientemente retirada de la flota de Union Pacific.
Su imponente figura de 185 toneladas está propulsada por un motor diesel EMD 710G3B de 2 tiempos, capaz de generar una potencia de 4000Hp y un esfuerzo tractivo de 163,000Lbs al arranque y 113,000Lbs de manera continua, gracias a sus motores de tracción de corriente directa.
El anuncio de que el tren estará operativo para el transporte de pasajeros y carga en septiembre refuerza la intención del gobierno de priorizar el fortalecimiento de la infraestructura de transporte y logística.
Además de las implicaciones en el transporte de mercancías y personas, el Corredor Interoceánico también busca promover el desarrollo industrial en la región.
Al respecto, se ha dado a conocer que 60 empresas han mostrado interés en participar en la creación de los cinco parques industriales planeados para el corredor, siendo cinco de ellos ubicados en Veracruz y otros cinco en Oaxaca.
Este esfuerzo apunta a diversificar las oportunidades económicas en la región y contribuir al crecimiento sostenible a través de la inversión y la generación de empleo.
El proyecto del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec también lleva consigo un sentido histórico, ya que este año se cumplen 150 años desde la inauguración del primer tren de pasajeros en México, que conectaba la Ciudad de México con el puerto de Veracruz.
En palabras del presidente López Obrador, el objetivo no es solo recobrar parte de la rica tradición ferroviaria del país, sino también extenderla y modernizarla para satisfacer las necesidades del siglo XXI.
La visión contempla no solo la recuperación de rutas olvidadas, sino la expansión hacia nuevas conexiones, como la ruta del Istmo hasta Guatemala.
El Corredor Interoceánico se divide en tres líneas principales: la Línea Z, de 308 kilómetros, que enlaza el Golfo de México con el océano Pacífico desde Coatzacoalcos, Veracruz, hasta Salina Cruz, Oaxaca; la Línea FA, de 329 kilómetros, que conecta Coatzacoalcos con Palenque, Chiapas, y que se interconectará con el Tren Maya; finalmente, la Línea K, de 459 kilómetros, une Ixtepec, Oaxaca, con Ciudad Hidalgo en Chiapas, llegando a los límites con Guatemala.
Además de estas líneas principales, las obras complementarias incluyen estaciones de pasajeros, laderos, estaciones de abastecimiento, talleres, patios, centros de control y cocheras, todo diseñado para garantizar un funcionamiento eficiente y seguro.
A medida que el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec toma forma y se acerca a su fecha de inicio de operaciones, México se encuentra al borde de una nueva etapa en su historia ferroviaria.
Las expectativas están puestas en los beneficios económicos, sociales y de desarrollo que este proyecto podría traer consigo.