| 2023-04-13
Las personas altamente sensibles (PAS) son aquellas que experimentan el mundo de una manera más profunda y emocionalmente intensa que la mayoría de las personas.
Según la psicóloga Dra. Elaine Aron, aproximadamente el 15-20% de la población posee esta característica.
Las personas altamente sensibles tienen una mayor capacidad para percibir estímulos sensoriales, como sonidos, luces, texturas, aromas, y pueden sentirse abrumados por ellas. También son más propensas a sentir emociones intensas y a ser profundamente afectadas por la energía y las emociones de las personas que las rodean.
A menudo, se sienten incomprendidas o malinterpretadas. Pueden ser percibidas como emocionalmente frágiles o demasiado intensas, lo que puede llevar a la incomodidad y a la falta de empatía por parte de aquellos que no comparten su sensibilidad.
Sin embargo, ser altamente sensible no es una debilidad. De hecho, las personas altamente sensibles pueden ser muy empáticas, creativas y conscientes. Tienen la capacidad de leer las emociones de los demás y de conectar profundamente con la belleza del mundo natural y del arte.
Para aquellos que son altamente sensibles, es importante aprender a manejar y comprender su sensibilidad. Esto puede incluir la práctica de la meditación y la atención plena, la creación de límites saludables para evitar la sobrecarga sensorial y emocional, y la búsqueda de actividades que fomenten la conexión con la naturaleza y con la creatividad.