| 2023-10-26
Existe un miedo social aprendido que viene inculcado desde pasadas generaciones en la que la soltería es vista como fracaso social. Una persona soltera cargaba consigo el estigma de quedarse solo/sola por el resto de su vida, o lo que es igual con la frase, "quedó para vestir santos".
Por algo su etimología en latín lo descubre: soltería= desamparado, solitarios, impares. Afortunadamente, los tiempos han cambiado. Aunque existe todavía muchos prejuicios y presión social al respecto, cada vez más personas entienden que la soltería no es sinónimo de soledad. Atrás quedó esa vieja y discriminatoria relación de la soltería como alguien carente de motivaciones, fracasado o sin rumbo fijo en la vida. Todo lo contrario. La soltería debe ser vista como una oportunidad para tu desarrollo personal, para tu autoconocimiento, para vivir a plenitud y tener una relación más sana contigo mismo.
Entonces, ¿fracaso o logro personal?
Lo primero que debes entender es que nunca puedes ceder a la presión social de considerarlo como un fracaso. La soltería es una transición saludable, y una etapa de la vida que puede ser muy gratificante si sabes cómo aprovecharla. De nada sirve, mantenerse en una relación de pareja no deseada solo por el miedo a la soltería, ya que esto solo enfatizará tu sensación de soledad, además de precipitarte a tomar decisiones erróneas que te mantengan en la infelicidad.
Muchas veces cometemos el error de idealizar el amor romántico, creyendo que la única manera de encontrar el sentido de la vida es teniendo una pareja a tu lado. Es un patrón que muchas películas, libros y creencias nos han inculcado. Pero la verdad es que este es un mensaje erróneo.
Prioriza tu felicidad y tu bienestar ante todo lo demás. Trabaja en ti y en tu autoestima. También pregúntate si hay un patrón de dependencia que viene desde tu niñez y que estás reproduciendo a través de la pareja. Son aspectos que pueden ayudarte a sanar la relación contigo mismo. Entonces, en vez de verlo como un fracaso, quiero que veas la soltería como un proceso de aprovechamiento para trabajar tu paz interior, tu independencia, tu autonomía. Y sí, visto así, es un logro personal trabajar en nosotros mismos antes de estar en pareja.